La digitalización y la lucha contra el fraude fiscal se han convertido en prioridades para la Agencia Tributaria en los últimos años. En este contexto, el sistema Verifactu surge como una nueva obligación para las empresas, con el objetivo de optimizar la gestión de las facturas, automatizar los procesos fiscales y garantizar la integridad de los registros fiscales.
En este artículo, exploramos qué es Verifactu, a quién afecta, en qué consiste y cómo puede influir en el futuro de las empresas.
¿En qué consiste Verifactu?
Como ya hemos mencionado, Verifactu es un sistema impulsado por la Agencia Tributaria que persigue luchar contra el fraude fiscal e impulsar la digitalización y automatización de los procesos de fiscalidad empresarial.
Para lograrlo, se implementan cambios clave en la gestión de las facturas, exigiendo que las aplicaciones informáticas de facturación cumplan con requisitos específicos:
- Se deberá generar un registro de facturación para cada nueva factura emitida, así como en caso de anulación o rectificación.
- Este registro no solo debe ser claro y accesible, sino que debe garantizar la integridad, conservación, accesibilidad y legibilidad de los datos durante el tiempo que se mantengan activos.
- Los sistemas deberán enviar automáticamente los registros de facturación a Hacienda, lo que simplifica y automatiza aún más el proceso fiscal, facilitando tanto la gestión interna de las empresas como el control por parte de la Agencia Tributaria.
- Las aplicaciones informáticas deberán registrar los eventos específicos que permitan una trazabilidad total de la actividad en el programa de facturación. Además, estos registros de eventos serán inalterables y deberán conservarse hasta que prescriban las obligaciones tributarias.
Todas estas nuevas exigencias buscan garantizar no solo el cumplimiento normativo, sino también una mayor automatización, seguridad e integridad en el proceso de emisión, registro y conservación de las facturas.
¿A quién afecta Verifactu?
Es importante recalcar que Verifactu no es una obligación aplicable a todos los contribuyentes, sino que tiene un alcance específico. Afecta, principalmente, a:
- Contribuyentes del Impuesto de Sociedades.
- Contribuyentes del IRPF que realicen actividades económicas.
- Entidades en atribución de rentas (como lo son comunidades de bienes y sociedades civiles) que desarrollen actividades económicas.
Sin embargo, existen algunas excepciones importantes que permiten que ciertos sectores queden fuera de esta obligación. Un ejemplo son los contribuyentes acogidos al SII (Sistema de Información Inmediata) o aquellos que tributen bajo el régimen de agricultura, ganadería o pesca. Estos se encontrarán exentos siempre y cuando no utilicen sistemas informáticos para emitir facturas. También hay sectores con autorización especial de la AEAT que no estarán sujetos a estas nuevas obligaciones.
Sistemas Verifactu y No Verificables: ¿Cuál elegir?
Dentro de los sistemas de facturación SIF, se distinguen dos tipos de sistemas de facturación:
- Sistemas no verificables. Estos sistemas cumplen con todos los requisitos técnicos exigidos, pero no remiten los registros directamente a Hacienda. Aunque cumplen con las normativas de facturación, carecen de la automatización y trazabilidad que ofrece Verifactu.
- Sistemas Verifactu. Son sistemas avanzados que permiten el envío automático, continuo y seguro de los registros de facturación a Hacienda. Estos sistemas no solo garantizan la seguridad e integridad de los datos, sino que también permiten una validación más sencilla de las facturas mediante un código QR, lo que facilita la verificación de la información tanto para los contribuyentes como para la Agencia Tributaria. En el caso de optar por este sistema, se deberá mantener hasta el final del ejercicio.
Es muy probable que las empresas que opten por un sistema Verifactu tengan menos posibilidades de ser comprobadas por hacienda que si recurren a sistemas no verificables. En caso de comprobación, además de poder requerir que se le envíe copia de los registros de facturación, hacienda podrá personarse en el lugar donde se utilice el sistema informático y exigir el acceso completo e inmediato a dichos registros.
¿Cuándo entra en vigor Verifactu?
Aunque originalmente se había establecido su entrada en vigor para julio de 2025, el Ministerio de Hacienda ha decidido proponer un aplazamiento para dar más tiempo a las empresas a adaptarse a esta nueva normativa. De esta forma, los contribuyentes del Impuesto de Sociedades tendrán hasta el 1 de enero de 2026 para implementar Verifactu, mientras que el resto de los contribuyentes deberán cumplir con la normativa a partir del 1 de julio de 2026.
¿Cómo puede ayudarte Torrealday?
En Torrealday, somos especialistas en asesoría fiscal en Bilbao, por lo que comprendemos la importancia de mantenerse al día con los cambios legislativos, especialmente aquellos que afectan a la gestión de las facturas y las obligaciones fiscales.
Sabemos que la implementación de Verifactu puede resultar un desafío para muchas empresas, pero con nuestro acompañamiento, podrás adaptarte sin problemas.
Podemos ayudarte a seleccionar el sistema de facturación adecuado, asegurarnos de que tu empresa cumpla con todas las nuevas obligaciones y brindarte el soporte necesario para garantizar una transición sin contratiempos.
Si necesitas más información o asistencia para adaptarte a esta nueva normativa, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.